Cinco.

Otra noche en el hastío de no poder entenderte..
De repente tu gran mirada se me hace pequeña y es como si desaparecieras del mapa.. me desconciertas y tus ojos verdes como estrellas se vuelven agujeros negros que absorben cada pedacito de mi ser sin dejarme respirar si no es tu aire. Esto me está atragantando las ideas, no entiendo como algo tan pequeño puede llegar a hacerse tan grande al tocar con la punta de los dedos el aforo sensible de mi corazón. No le veo la lógica a que esto se esté gastando tan rápido, no somos una vela, no somos una puta llama que va consumiendo un palo de cera, somos personas, el lunes nos queríamos las dos, en mi cama, recién levantadas de un sueño tan ligero que parecía real y entre el aroma de tus brazos me creí ese te quiero que se te escapó con la mirada fija en como mi mano recorría tu rostro de una forma imperceptible. Hoy, sábado de madrugada y sin noticias de ti no sería capaz de creérmelo.. te echo de menos, la distancia me marea. Espero el jueves para volver a verte, se me hace eterno cada instante sin ti, dulce princesa.